Esta categoría, nacida en Francia, tuvo muchos problemas de juventud. Equipar a un coche de tracción delantera con un motor atmosférico que entregaba 300 cv a casi 10.000 rpm planteaba muchos problemas, principalmente de fiabilidad y de poder traccionar tanta potencia con sólo dos ruedas motrices.
El buen hacer de los ingenieros de PSA crearon los que fueron los referentes de la categoría: introdujeron el cambio secuencial, el diferencial activo (que controlaba electrónicamente la potencia que recibía cada rueda) y pequeños detalles como la distribución del peso, que consiguieron que estos coches superaran a los WRC sobre asfalto seco.
Dejando de lado sus resultados, que fueron buenos, la belleza de este coche en su versión "kit car" era algo espectacular para el momento. Un coche cuyas facciones de calle se reconocían pero que además conseguía tener un aspecto puro de competición.
El 306 Maxi tuvo sus mejores momentos en el Campeonato francés de rallyes, donde ganó en 1996 y 1997 con el histórico Gilles Panizzi al volante. También tuvo sus momentos buenos en el mundial de rallyes, con una segunda posición en el Montecarlo de 1996 con François Delecour y dos podiums en 1997, en Catalunya y Córcega, con Panizzi. En ese momento Peugeot y el piloto francés, experto en asfalto, ganaron popularidad.
Para comenzar el proyecto parto de un kit artesanal en resina realizada por Alberto Gutirrez ¨Disain¨, gran modelista y mejor persona 😉
Tras desbarbar la carrocería le lijo el techo, que en esta unidad está ligeramente abombado, y corrijo un par de poros en los bajos del coche. Por otro lado, la resina es realmente exquisita en lo que a calidad se refiere.
Una vez lijada y lavada, la imprimo y la pinto en blanco, creando la base para realizar el trabajo de decoración.
Preparo la hoja de calcas que vienen incluidas en el kit, con la decoración del Rally de Cataluña de 1997, además del MicroSet y el MicroSol.
Voy aplicándolas poco a poco. Las laterales que son muy largas, las aplico en tres partes, haciendo coincidir los cortes con las ranuras de las puertas y las de las aletas.
Con grandes dosis de paciencia y de Microsol, consigo que se adapten a las formas redondeadas de la carrocería. Una vez bien secas las protejo con un par de capas de barniz acrílico antes de aplicar la laca bicapa definitiva.
Después de dejarla secar 24 horas, detallo las ventanillas y le coloco los espejos y los cristales.
Preparo la bandeja en la que coloco al piloto y al copiloto,los arneses y la jaula de seguridad (adaptada de un 106), y pinto alguna de sus partes como son el extintor y la rueda de repuesto. Así presentada queda un poco rara, pero una vez dentro se adapta a la perfección.
La coloco en el interior del coche y ya instalo los faros, pilotos traseros, antenas y otros detalles como los cierres traseros, manilla ...
Ahora preparo las ruedas, que son de una manufactura casi profesional. Pinto los cubos de blanco con el fondo en negro mate, los insertos en blanco también y le coloco las calca de ¨Speedline¨ y le añado unos discos de freno que había preparado hace tiempo para los 106. Para rematar la faena coloco cuatro válvulas de aire.
Adapto un chasis universal de OSM , al que le tengo que corregir los agujeros de sujección, así como variar su altura respecto a la carrocería. Debido a eso tengo que reforzarlo con plástico y lo pinto en negro mate para unificar su color. Por último le añado el tubo de escape, que no es más que un terminal eléctrico.
Una vez adaptado el conjunto chasis-carrocería el resultado es éste 😄
Espero que os haya gustado.
Un saludo.
Paco.