lunes, 29 de agosto de 2011

Fiat Abarth 695 SS

Carlo Abarth

Detrás de cada gran idea suele estar la figura de un genio y detrás de la marca Abarth está la intensa y apasionante vida de Carlo Abarth, todo un visionario que supo aplicar toda su pasión y genialidad por el mundo del motor a sus creaciones y hacer que su “escorpión” se convirtiera en un referente indiscutible para los aficionados a los vehículos de altas prestaciones.
Nació en Viena el 15 de noviembre de 1908, bajo el símbolo del escorpión que le acompañará durante toda su carrera.


La fama y los grandes éxitos de Abarth están asociados al mundo del automóvil, pero los comienzos de Carlo Abarth fueron en el mundo de las motocicletas. Desde muy joven, mostró su capacidad tecnológica en las modificaciones de motocicletas para las competiciones en las que él mismo participaba. En 1930 construye su primera motocicleta con el nombre de Abarth, pero un grave accidente durante una carrera en Liz le hace pasarse a los sidecars, disciplina en la que empieza a conseguir fama y en la que el nombre de Abarth ya empieza a asociarse con el máximo refinamiento técnico y las más altas prestaciones. Un nuevo accidente, en 1939, hace que Carlo Abarth deje el mundo de la competición y comience una nueva vida.


En 1945 se traslada a Merano, en Italia, y se convierte en ciudadano italiano de pleno derecho, momento en el que pasa a llamarse Carlo en lugar de Karl, su nombre original. Al año siguiente de su llegada a Italia crea, junto con Ferdinand Porsche y Tazio Nuvolari el equipo Cisitalia, con una gran cantidad de éxitos en competición.


Cuando el proyecto Cisitalia llega a su fin, Carlo crea en 1949 la compañía Abarth & Co, junto con el piloto Guido Scagliarini. El primer vehículo creado por la nueva compañía fue el 204 A Roadstar, desarrollado sobre la base del Fiat 1100 y que inmediatamente ganó los campeonatos 1100 y la Fórmula 2.



Simultáneamente, Abarth tiene la genial intuición de unir a la actividad de las carreras la atención por el gran público y comienza a realizar los famosos kits de elaboración para vehículos de serie que aumentan la potencia, velocidad máxima y aceleración. Elementos destacados de los kits fueron las marmitas de descarga que, con el correr de los años, se transformarán en un verdadero icono del “estilo Abarth”. Gracias a la experiencia acumulada en los años anteriores con las motos, las marmitas Abarth se convirtieron en un producto tecnológicamente de vanguardia. Los primeros prototipos preveían un tubo central de sección constante y pasajes laterales en lana de vidrio y eliminación de todos los diafragmas para contener al máximo la compresión de los gases. Un sistema simple pero innovador, que dio a sus productos una clara ventaja en las prestaciones y un inconfundible ruido sordo y pleno. En pocos años l’Abarth & C. alcanza niveles globales: en 1962 produce 257.000 marmitas con un equipo de 375 personas, el 65% está destinado a la exportación. Las primeras 50 unidades fueron realizadas para el Fiat “Topolino”.


En los años posteriores, las actividades en competición y sus elegantes campañas publicitarias hacen que el crecimiento de Abarth sea sorprendente, forjandose ya el mito del escorpión. En 1956, con un Fiat Abarth 750 carrozado por Bertone, empieza el particular “currículum” de récords: el 18 de junio, en la pista de Monza, bate el récord de las 24 horas, cubriendo 3.743 km a una velocidad media de 155 km/h. Unos días más tarde, del 27 al 29 de junio, en el mismo circuito de Lombardía, consigue otros cinco records históricos: los 5.000 y los 10.000 km; las 5.000 millas; y las 48 y las 72 horas.


El mismo coche fue posteriormente carrozado por Zagato en dos veriones diferentes: Fiat Abarth 750 Zagato (1956) y Fiat Abarth 750 GT Zagato (1956). El 11 y el 12 de mayo de 1957 en la 24ª edición de las Mil Millas estaban presentes nada menos que 20 coches del “escorpión” en la clase 750, de los cuales 16 terminaron la carrera.


Pero fue en 1958 cuando Abarth creó uno de sus iconos y una verdadera obra maestra que sentó la base de lo que sería su desarrollo futuro y el éxito de los años posteriores. El pequeño Fiat 500, lanzado en el mercado italiano sólo un año antes, transforma completamente su imagen y vocación de coche urbano para convertirse en un pequeño deportivo gracias al toque maestro de Abarth. Sus apariciones y sus éxitos en competición hacen que las evoluciones del pequeño Abarth 500 se sucedan una tras otra, cada vez más potentes y efectivas.


En la década de los 60 el nombre de Abarth ya se asocia a prestaciones, deportividad y emoción. Las transformaciones sobre la base de los distintos vehículos de Fiat, en especial de los más pequeños, adquieren una popularidad desmesurada y no faltan los “imitadores” de sus preparaciones. Algunos de sus modelos más representativos son el 850 TC, que ganó en todos los circuitos internacionales, incluido Nurbrugring, el Fiat Abarth 1000 Berlina o el 2300 S, queen el circuito de Monza consigue una extraordinaria serie de récords a pesar de las complicadas condiciones climatológicas en las que se disputó la prueba.


En 1965, casi con 57 años, Carlo Abarth quiso obtener en persona un récord y el 20 de octubre se puso a los mando del Fiat Abarth 1000 Monoposto Record clase G de 105 CV. Consiguió el récord de aceleración en el cuarto de milla y en 500 metros, mientras que al día siguiente, con un monoplaza clase E de 2000 cc, obtuvo los mismos records para clases superiores. Una muestra más del tesón y capacidad de superación de Carlo Abarth es que para conseguir sentarse en el reducido habitáculo de estos dos vehículos tuvo que adelgazar 30 kilos, toda una hazaña para un hombre de casi 57 años.


En 1971 Abarth pasa a ser propiedad de Fiat y el “apellido” y el símbolo del escorpión ocupan un lugar destacado en las versiones más potentes y deportivas de todos los Fiat. El último vehículo en cuyo desarrollo participó activamente Carlo Abarth fue el A112, poco antes de morir.Pero la historia de Abarth continuó a lo largo de los '80 con vehículos tan victoriosos como el Fiat 131 Abarth, Campeón del Mundo de Rallys, o el Fiat Ritmo Abarth. Carlo Abarth fallece el 24 de octubre de 1979, bajo el mismo signo con el cual había nacido: Escorpio


Fiat Abarth 695 SS (Sprint Speciale)
Sobre la base del Fiat 500, se le aumenta la cilindrada hasta los 700 cc. La denominación de SS viene de montar un nuevo cigüeñal, unos nuevos pistones más estrechos que aumentan la compresión y un árbol de levas aligerado y con otro cruce. Monta un carburador Solex 34 PBIC con los conductos mejorados. Válvulas y muelles también son reforzados al igual que la bomba de aceite. El colector de escape es modificado por uno de diseño propio.


Con todas las modificaciones se consiguen 45 CV para un peso inferior a 500 Kg. Para el grupo final se recurre a uno más corto (4-33 frente a 5-125). Para la monta de neumáticos se recurre a unas llantas de aleación específicas de 145x12". Como extra se ofrece dotar al coche de frenos de disco en el tren delantero. Con la suspensión mejorada y endurecida, lo ligero de la carrocería, hace que el coche sea muy manejable, ágil y estable, capaz de llegar a los 100 en 16 sg.


Para montar este coche parto de un kit que le cogí a Dario de UMK (Unotreintaidos Model Kits) en uno de los Foroslots. La verdad, es que me gustan un montón las "pelotillas" que hace ok

Tras desbarbar la carrocería le toca lijado y lavado con agua y jabón.

Para el chasis voy a utilizar uno del master que hice para el Fiat 126 de esta misma firma. Marco por donde hay que cortar.

Y corto.

Vuelvo a ensamblarlo y le retraso un poco el soporte de la guía.

Antes de pintar, imprimo con Vallejo.

Y un par de manos de Dupli color blanco.

Dario me facilita un juego de calcas con varias opciones y colores ( negro o rojo). Como la decoración que voy a hacer no va a ser de un coche real de competición me decanto por una combinación de rojo sobre blanco con franja roja por la parte inferior de la puerta.

Para hacer las defensas utilizo unas que me envío el compañero Forfi con el Fiat 128 gordito. Saco unas copias y las adapto a este coche.

Una vez adaptadas las envío a cromar.

Y así quedan una vez colocadas. Para los faros utilizo unos de un kit de Hobbyescala ( los que no utilicé en el Seat 124 de Fábregas). Aunque Darío me incluyó en el kit unos de fotograbado, utilizo éstos porque al tener mayor grosor, consigo que simule el cerquillo cromado de los focos.

Tambien saco un molde de una parrilla de un 600 y de los cierres de capót.

De un estático de 1/24, recupero unos pequeños pilotos, que simularán los intermitentes ( o luces de posición, no lo sé) que van bajo los faros.

Para los intermitentes laterales utilizo la cabeza de dos alfileres y las pinto de naranja translúcido.

Y así vá la pelotilla de momento je, je


Bien aconsejado por mi amigo Toni de http://pasionslot.mforos.com/visit/?http://www.artecnodecals.com , acorto un poco las "alas" del escudo frontal. Ahora quedan así.

Pinto el motor simulado que traía el kit de gris satinado y un par de detalles en negro. Le pego un resto de un blister cromado para simular la salida de gases hacia el escape.

Pinto la batería de negro y le pego un par de cables.

Lo coloco todo en el hueco del motor.

Por último, con unos alfileres le hago los soportes de la tapa del motor. Podía pintarlos de negro o rojo, pero voy a dejarlos cromados.

Interior del coche. Completo los asientos con un trozo de tapón de un tetrabrick.

Dario hace que siempre me rompa un poco la cabeza, cosa que por otro lado no me disgusta. Me lo tomo como un reto je, je . Para hacer el volante voy a aprovechar un inserto que le preparé a Nuberu de unas llantas Ghotti.

Le elimino 3 radios y lo pinto de negro mate.

Para la cabeza del piloto aprovecho una del "Shelby" de los DBR1. La que traía el kit me parecía demasiado actual.

Una vez eliminadas las gafas y pintado queda así, para regocijo del personal burla

Y así se queda el interior.

Pinto los marcos de las ventanillas.

Por último, le monto los cristales y el interior al coche.

Pinto el chasis de negro mate y le instalo directamente la mecánica del 1000TC de Reprotec.

Y tras colocarle la matrícula delantera y enguarrar con aguachirri unas salidas que van encima de la tapa del motor le hago las fotos "de bonito".









Y éstas con su hermano mayor la ola



Sé que le faltan los característicos limpiaparabrisas dobles, pero es que aún no le he encontrado unos para él. Seguiré buscando.

Un saludo hola 

1 comentario:

  1. Pedazo de carro te a quedado... y ese pedazo de espejo de donde a salido?, tenia dudas sobre el modelo pero creo que al final terminare haciendo un par de kit un saludo.

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